Automotive Industry Trends 2023

Tendencias de la Industria del Automóvil para 2023: La Conectividad es el Futuro

by: Lisa Mungia | 30 de marzo de 2023

Imagina conducir el KITT de Knight Rider para hacer la compra, llevar a tus hijos al colegio o ir al gimnasio. ¿Parece demasiado bueno para ser cierto? Qué tal si te digo que la industria automovilística tiene algo que decir al respecto...

El acrónimo ACES circula en el sector automovilístico desde hace unos años, y se utiliza para describir la transformación digital y tecnológica que han sufrido los vehículos tradicionales. En este artículo, hablaremos sobre las tendencias del automóvil, los vehículos autónomos y cómo panorama de la industria automovilística está cambiando significativamente.

La siguiente tendencia de ACES tiene que ver con la conectividad, cada vez más presente en los automóviles. Vivimos en un mundo cada vez más conectado, y era solo cuestión de tiempo que los coches que conducimos reflejaran las capacidades de nuestros smartphones. Se estima que en el año 2030, alrededor del 96% de los automóviles que se vendan en el mundo estarán conectados, frente al 50% actual. Pero ¿cómo afectarán los avances tecnológicos de esta industria a los fabricantes y proveedores?

Un cambio veloz en la conectividad de los vehículos

Un coche conectado es un vehículo que puede comunicarse bidireccionalmente con otros sistemas externos a él, como serían la infraestructura de la carretera, otros vehículos o un centro de datos. Los vehículos conectados son un factor importante en el avance del IoT (Internet of Things) en automoción, permitiendo funciones como el control de crucero adaptativo o la planificación automatizada de rutas.

Actualmente, todos los servicios conectados a tu coche lo convierten en un dispositivo personalizable al 100%: los coches se están convirtiendo en dispositivos dinámicos y actualizables como los smartphones, y no parece que la tendencia vaya a frenarse…

Se abre un mundo de oportunidades

El aumento en la conectividad en los vehículos está abriendo un mundo de oportunidades. La clave de este desarrollo está en la capacidad de los vehículos de recopilar datos, que pueden utilizarse para:

  • Predecir necesidades de mantenimiento
  • Comunicarse con otros vehículos
  • Evitar posibles accidentes
  • Incluso, con el tiempo, permitir que los coches funcionen de forma totalmente autónoma.

Los vehículos conectados brindan a los fabricantes de automóviles y a las industrias adyacentes la oportunidad de establecer sinergias mutuamente beneficiosas y crear nuevas fuentes de ingresos. Esto incluye no sólo a los fabricantes de automóviles tradicionales, concesionarios y proveedores, sino también a las compañías de seguros, empresas de tecnología, desarrolladores de software y otras partes interesadas en la industria.

Los beneficios para el consumidor incluyen el diagnóstico y mantenimiento del vehículo, junto con actualizaciones de una variedad de servicios y personalización. Los datos del vehículo pueden utilizarse para mejorar la experiencia del consumidor, ofreciendo nuevos servicios y mejorando el rendimiento del vehículo.

Acelerando hacia una rentabilidad máxima

La industria automovilística ha funcionado con el mismo modelo de negocio durante más de un siglo, el cual se basa en la producción, venta y mantenimiento de vehículos. Los expertos del sector predicen que los servicios digitales de los coches conectados, y no los concesionarios, se convertirán en el principal motor de rentabilidad posventa de los fabricantes de vehículos, hasta el punto de que las marcas de vehículos individuales dejarán de ser importantes para los consumidores en favor del software y los servicios integrados.

La conectividad de los vehículos ha abierto la puerta a nuevas fuentes de ingresos y empresas de todo el mundo están ansiosas por aprovecharlas. Tesla ha sido considerada líder en aplicaciones conectadas con actualizaciones de vehículos por aire (OTA). Muchos otros fabricantes de automóviles están impulsando iniciativas similares en ofertas de productos y suscripciones habilitadas para software.

Perspectivas para los profesionales del sector del automóvil

Las empresas de automoción se enfrentan a retos financieros que pueden hacerles pisar el freno. Desde la gestión de concesionarios e incentivos para flotas hasta los precios especiales y las reclamaciones de garantía, los reembolsos o las reducciones de costes, se vuelve cada vez más necesario implantar soluciones que ayuden a impulsar sus ingresos.

Desde el punto de vista del Revenue Management, para competir en el mercado de la automoción han sido necesarias estrategias complejas de cálculo de costes de los productos, de gestión de precios o de programas de incentivos. Para su empresa, esto puede implicar procesos manuales, hojas de cálculo, soluciones de terceros o herramientas no integradas y poco flexibles...

Estos sistemas engorrosos y complejos impiden una planificación eficaz de ofertas e incentivos. Además, la introducción manual de datos y la falta de controles eficaces conllevan un riesgo de errores, como el pago indebido de incentivos o márgenes inferiores a los previstos, lo que puede repercutir negativamente en los resultados.

¡Tenemos la solución!

Se prevé que en 2025 habrá más de 400 millones de vehículos conectados en la carretera, frente a los 237 millones de 2021. En 2030, el 96% de todos los vehículos estarán conectados. Es decir, prácticamente todos los vehículos en circulación estarán conectados e intercambiarán datos con la nube.

Si trabajas en la industria del automóvil, la gran pregunta es: ¿cómo convertir una tecnología en auge en una fuente de beneficios estable y fiable? Los expertos estiman que los programas de vehículos conectados generarán 400.000 millones de euros de valor incremental anual de aquí al 2030.

Para aprovechar al máximo estos beneficios potenciales, se necesitará un enfoque más racionalizado de los incentivos y los procesos de Revenue Management, así como un uso eficiente de los datos, de cara a definir una estrategia eficiente de gestión y optimización de precios.

Los fabricantes de automóviles siempre parecen descubrir la manera de afrontar los retos que van apareciendo, pero… ¿Serán capaces de unirse a esta nueva ola de la conectividad?